Le cuento a la melodía del viento lo que me regalaste a escondida del mar.
Ese imposible que me donaste para tirarlo y escapar.
Aquella revolución delirante.
Esas caricias adictivas en mi cabeza.
Y mientras tú confiesas aquella historia de amores bebibles;
Ese anciano de años perdidos se desconecta con tu pasar.
Intento no hipnotizarme, y que mi sonrisa sea causa de tus sueños.
Bordeo tus pasos marcados en el piso, Buscando crear.
Bailo en cada espacio de tus frases y me dejo llevar.
Me visto de tu musa, aroma de lavanda con algún jazz.
Y mientras construyo mi cuerpo con tus versos, respiro y salgo de mi posición fetal.
Robo el tiempo de alguna mariposa. Siento la piel.
El pétalo de una margarita perdida pasa por delante de los dos.
Marcando espacios, lógica, esplendor.
Creando la realidad con retazos.
Y con esos recuerdos de encuentros pasados.
Y por ahí, en estos lugares, soy.
bellisimo, y sin una letra que agregar
ResponderEliminarun beso
holaaa
ResponderEliminarde paso por tu hermoso lugar para leerte.
Me encanto lo que has dejado.
Nos seguimos visitando.
besos
Tus palabras saben a tutifruti!
ResponderEliminar:D
Abrazo!!